La arquitectura sustentable es una tendencia creciente en el sector de la construcción, pero aún enfrenta mitos que limitan su adopción masiva. Ernesto Mizrahi Levy, experto en diseño arquitectónico y consultor en proyectos sustentables, desmitifica algunos de los conceptos erróneos más comunes sobre esta práctica.
“La arquitectura sustentable no es un lujo ni una moda pasajera; es una necesidad que responde al cambio climático y a la eficiencia en el uso de recursos,” afirma Mizrahi.
Uno de los mitos más persistentes es que la arquitectura sustentable es excesivamente cara. Según un informe de 2023 del World Green Building Council (WGBC), los costos iniciales de construcción sustentable pueden ser entre un 2% y 5% más altos que los métodos tradicionales. Sin embargo, el ahorro a largo plazo en consumo energético y mantenimiento puede superar el 30%, especialmente en edificios que integren sistemas pasivos de ventilación, paneles solares y materiales reciclados, según indicó Ernesto Mizrahi Levy.
Otro mito frecuente es que la arquitectura sustentable compromete la estética de los proyectos, idea que el arquitecto israelí.
“La sostenibilidad y el diseño no son conceptos opuestos; por el contrario, se complementan para crear espacios funcionales, atractivos y responsables con el entorno. Como ejemplo tenemos los desarrollos que emplean jardines verticales, estructuras modulares y acabados naturales, que no solo mejoran la calidad del aire, sino que también aportan un valor visual significativo”, precisó.
La creencia de que la arquitectura sustentable es adecuada únicamente para climas específicos también ha sido desmentida. Estudios recientes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) demuestran que técnicas como el aislamiento térmico, el diseño bioclimático y el uso eficiente de agua son aplicables a diversas regiones del país, desde zonas áridas hasta áreas tropicales.
En ese sentido Mizrahi Levy precisó que México tiene una riqueza climática y de materiales que permite implementar soluciones personalizadas y eficaces en cualquier tipo de entorno.
Además de desmentir estos mitos, Ernesto Mizrahi Levy hizo énfasis en la importancia de la educación y la difusión de información precisa sobre el tema.
“El desconocimiento es el mayor obstáculo para la adopción de prácticas sustentables. Necesitamos más talleres, cursos y campañas que muestren los beneficios tangibles de construir de manera responsable,” aseguró el especialista.
La arquitectura sustentable no solo tiene el potencial de transformar el paisaje urbano, sino también de contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, particularmente en la reducción de emisiones de carbono. Según el WGBC, los edificios representan el 37% de las emisiones globales de CO₂ relacionadas con la energía. Para Mizrahi Levy, cada proyecto sustentable es una oportunidad de mitigar este impacto y avanzar hacia ciudades más habitables y equilibradas.
“El futuro de la construcción no solo se trata de edificar, sino de hacerlo con conciencia y compromiso hacia el medio ambiente y las generaciones futuras y es desde ahí que la arquitectura sustentable se posiciona como una herramienta clave para el desarrollo urbano responsable”, puntualizó.
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