Artesanto, un destacado desarrollo residencial ubicado en el nuevo polo económico de San Miguel de Allende conocido como Distrito Corazón, ha experimentado una serie de situaciones que han afectado temporalmente su construcción, pero que ya se encuentran en vías de resolución definitiva.
El proyecto, lanzado en 2016 con notable éxito comercial en la región, contempla usos mixtos incluyendo áreas residenciales, parques, hoteles y una zona comercial, diseñado para integrarse armónicamente con el entorno cultural y social de esta reconocida ciudad patrimonio de la humanidad.
El desarrollo comercial inicial de Artesanto y su recibimiento, fue sumamente positivo. Sin embargo, a inicios del año 2020, cuando se contemplaba avanzar en la construcción, la llegada de la pandemia al país y la incertidumbre financiera que se vivió a nivel global, impactó directamente en la continuidad de la obra al igual que en muchas otras.
Para el año 2021 y con un poco de optimismo en las expectativas financieras mundiales, se refinanció el proyecto, y estuvo listo para retomar la obra. No obstante, en octubre del mismo año, con el cambio de administración municipal en San Miguel de Allende, Artesanto, al igual que otros desarrollos en la región, fue sujeto a una suspensión preventiva por una revisión administrativa general. Durante este proceso, el proyecto logró demostrar plenamente que contaba con todas las autorizaciones y permisos vigentes y necesarios, resultando en el levantamiento de dicha suspensión a mediados del año 2023.
Dado el tiempo transcurrido y los efectos económicos derivados tanto de la pandemia como del proceso administrativo, Artesanto implementó un «Plan de Rescate», cuyo objetivo central fue reestructurar el proyecto para asegurar su viabilidad económica. Este plan implicó la renegociación de condiciones con sus clientes originales, ofreciéndoles garantías adicionales que aseguran plenamente sus intereses y aportaciones, ofreciéndoles la posibilidad de continuar con el proyecto o recuperar anticipos, según fuera su preferencia.
Este proceso de reestructura y comunicación con los clientes avanzó satisfactoriamente, logrando que para diciembre de 2024 aproximadamente el 90% de los inversionistas iniciales acordaran incorporarse al plan propuesto, permitiendo así que Artesanto recuperara su viabilidad financiera y comercial.
En la actualidad, el proyecto está en la etapa final para la obtención de un nuevo crédito puente, que es parte crucial de su estructura de financiera para solventar la obra. Durante 2025 se espera relanzar oficialmente Artesanto con una renovada propuesta comercial, reflejando el compromiso y apoyo de sus clientes, inversionistas y desarrolladores para concretar este importante desarrollo que contribuirá significativamente al crecimiento y fortalecimiento económico y social de San Miguel de Allende y la región del Bajío.
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