Vecinos del Centro Histórico padecen por banda delictiva

Foto Especial / Diario de Querétaro

Habitantes y vecinos del Centro Histórico de la ciudad de Querétaro padecen del crimen y violencia que ha desatado una banda delictiva denominada la Familia Criminal Graff (FCG).

A dicho grupo criminal se le atribuyen múltiples incidentes como el asesinato del joven Javier el pasado mes de octubre en la colonia Molinos de la Era.

Así como la agresión a apuñaladas a un oficial de movilidad el mes de noviembre pasado sobre Avenida Tecnológico y Pino Suárez; el asesinato de una mujer de la tercera edad por un robo en su domicilio en la colonia Las Rosas el pasado mes de julio; entre otros.

De la misma forma, se sabe que algunas otros de los delitos que cometen integrantes de la FCG son narcomenudeo, lesiones con arma blanca a policías y a peatones, robos a transeúntes y amenazas constantes a jovencitas estudiantes de la UAQ.

Por si fuera poco, diversos integrantes de dicha banda delictiva cuentan con antecedentes penales.

A uno se le atribuyen por lo menos 30 robos a transeúntes; otro por intento de homicidio en contra de su pareja y secuestro de su hijo; así como otros más que fueron detenidos por el homicidio de Javi, la agresión contra el oficial de movilidad y venta de drogas.

Banda delictiva siembra temor

El testimonio de varios vecinos de las colonias Las Rosas, La Era, Molinos de la Era, Niños Héroes, La Piedad y Centro, han señalado que esta banda está confirmada por al menos unos 30 hombres de diferentes edades.

También han indicado que entre algunas de las actividades delictivas de estos sujetos, las suelen perpetrar sobre Avenida del 57, Estío, Avenida Tecnológico con Pino Suárez, Ezequiel Montes a la altura del templo de Santa Rosa de Viterbo y en las calles Arteaga, San Andrés y Avenida Universidad.

Asimismo, afectados han detectado que esta banda de delincuentes, residen en diferentes colonias de la capital.

No obstante, al haber sido en su tiempo un barrio donde crecieron, suelen agruparse específicamente en el callejón de San Andrés, casi en cruce con Avenida Universidad, donde también algunos se dedican a la distribución de sustancias tóxicas al menudeo.

Al respecto, existen carpetas de investigación abiertas ante la Fiscalía; sin embargo, por falta de pruebas o al cumplir la sentencia mínima, muchos de los integrantes de dicha banda delictiva lograron salir de la cárcel y se encuentran de nuevo en las calles.

De acuerdo con algunos afectados, las autoridades no han procedido a las detenciones por no ser en flagrancia, situación que pone a los vecinos en desventaja ante las represalias constantes, que ha obligado a algunos vecinos a dejar su lugar de residencia para poner a salvo su integridad.

Con información de El Diario de Querétaro