La victoria del América sobre Querétaro en la Jornada 4 del Apertura 2025 quedó marcada por graves incidentes fuera de la cancha. Según el Ministerio Público, una pelea entre seguidores de ambos clubes dejó 33 detenidos y dos personas lesionadas, una de ellas con fracturas en el pómulo y la quijada.
El partido, celebrado el sábado 9 de agosto en el Estadio Ciudad de los Deportes, ya había enfrentado contratiempos. Una tormenta eléctrica y fuertes lluvias retrasaron el inicio más de una hora. Sin embargo, la espera valió para la afición local, cuando el canterano Dagoberto Espinoza marcó el gol del triunfo. Con una jugada individual y un remate al primer poste, aseguró la victoria 1-0 para las Águilas.
Pese a la alegría deportiva, la jornada cerró con un saldo lamentable. El periodista Carlos Jiménez informó que dos seguidores del América fueron identificados como los responsables de agredir brutalmente a un aficionado de Querétaro, causándole lesiones graves que requirieron hospitalización inmediata.
Vecinos de la zona han denunciado que la inseguridad ha aumentado desde que el América se mudó al recinto. Las riñas entre porras no son nuevas, pero este episodio reavivó el debate sobre la seguridad en los estadios y sus alrededores.
Detenidos y operativos policiales tras el encuentro
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), siete integrantes de la barra queretana, incluidos dos menores, fueron detenidos por su probable participación en agresiones. Cinco enfrentan cargos por lesiones y dos por agresiones directas.
El primer altercado se registró en las calles Kansas y Dakota, colonia Ampliación Nápoles. Un hombre denunció que fue golpeado sin provocación por un grupo que caminaba metros adelante. La policía interceptó a los señalados y, tras una revisión preventiva, los arrestó.
En otro hecho, la SSC atendió el caso de Sebastián Betancourt, hermano de un jugador, quien sufrió golpes y tuvo que ser trasladado a un hospital. La fiscalía ya inició las investigaciones para esclarecer lo ocurrido y definir la situación jurídica de los implicados.
Además, 26 integrantes del grupo de animación queretano fueron presentados ante un juez cívico por alterar el orden público e ingerir alcohol en la vía pública.
La violencia entre porras es un problema recurrente en el futbol mexicano. Aunque la mayoría de los aficionados acuden a disfrutar del deporte, los hechos de esta jornada evidencian la urgencia de reforzar las medidas de seguridad. Autoridades y directivos podrían endurecer protocolos para proteger a los asistentes y preservar la imagen del futbol nacional.
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